Mundo salvaje.
Creada por Genny Tartakovsky, conocido por Samurai Jack, Star Wars: Clone Wars y Hotel Transilvania, entre otras obras, y difundida por Adult Swim, me encuentro, con lo que es para mí, una de las mejores series de animación que he tenido el gusto de ver.
Como protagonistas tenemos a un hombre de las cavernas acreditado como “Spear” y a una tiranosaurio a la que fuera de pantalla la apodan “Fang”. Nombres que no escucharemos y que tampoco nos hará falta, pues la narración es puramente visual, sin diálogos. A primera vista suena algo extraño y te preguntas: ¿Cómo van a contar una historia así? La respuesta la obtienes a lo largo de los capítulos.
El primer episodio empieza directo, cruel y salvaje. A los pocos minutos de empezar tuve que parar y rebobinar y volver a contemplar cierta escena que me dejó impactado y que marcará al protagonista. La situación fue tan bestial que no llegué por ningún momento a esperármela. La tiranosaurio tampoco correrá buena suerte y ambos tendrán que unir sus fuerzas para acabar con un enemigo común.
En los restantes capítulos de la primera temporada, Tartakovsky nos mostrará un vasto universo lleno de peligros que van desde serpientes, vampiros, hombres simio y tribus salvajes. Cada uno contará una historia distinta en la que la única linealidad será el vagar por el mundo mientras nos van mostrando cada vez enemigos más temibles y difíciles de derrotar.
La sangre y el gore correrán por la lanza de Spear y por los dientes de Fang con una animación exquisita. La violencia explícita no sólo favorece el apartado visual, sino que es el nexo que más unirá a los personajes principales. Cada vez que avanzan los capítulos vemos como el vínculo del neandertal con la dinosaurio va a más y a más formando un gran equipo con alguna que otra situación cómica.
La primera temporada nos muestra un mundo realmente salvaje dominado por bestias y una temporalidad a modo de road movie, como si la pareja fuera vagando sin rumbo esperando encontrar su lugar. En la segunda, la cosa cambia. Todo es totalmente lineal. Cada nuevo capítulo continúa al anterior, engarzando una historia llena de personajes nuevos, enemigos todavía más letales y con una sensación de que nada puede ir peor. El relato es autoconclusivo, aunque Tartakovsky se ha abierto en sus últimas declaraciones a dos variantes. La primera es contar una nueva temporada. Una tercera que siga los acontecimientos de lo que hasta ahora ha ocurrido, y la segunda ocurrencia del creador, lo que él más ha tenido en mente, es crear otras historias de supervivencia bajo el nombre de Primal pero con otros protagonistas. Sea como sea, todo lo que hasta ahora se nos ha mostrado es un acierto absoluto que no debéis perderos.
Primal triunfó en los Creative Arts Emma Awars 2020, llevándose 3 de los 5 premios a los que optó. Ganó Tartakovsky en Storyboard, Scout Willis como director de arte, y Stephen DeStefano como diseñador de personajes. Premios bien merecidos.
A modo de curiosidad, existe una película llamada Primal: Tales of Savagery. No os molestéis en intentar encontrarla, es un largometraje de la misma serie, pero tiene truco. Simplemente es una concatenación de sus primeros capítulos.
Si os gustan las series de animación para adultos, no os lo penséis, darle al play. La tenéis disponible en HBO Max.
Por @javi_cine