Devaluarte en ocasiones funciona.
En 2002 llego a los cines Invicto de Walter Hill. Un drama carcelario con el boxeo de fondo, un vehículo a mayor gloria de su pareja protagonista Wesley Snipes y Ving Rhames, donde ambos se disputaban quien era el autentico campeón invicto de título.
Ya en 2006 la Nu Image produce una secuela directa al mercado doméstico. Hay que recordar que esta productora fundada por currantes de la Cannon y que luego se cambio el nombre por Millenium films, con la que ha producido títulos como Objetivo: La Casa Blanca o la saga de Los Mercenarios. Para el que no este acostumbrado a este tipo de cine de bajo presupuesto, hay que dejar claro que las ideas de guión son lo que hay, un bueno y un malo y no da pie para nada más.
Su argumento nos presenta de nuevo a George Chambers (Rhames en la original, ahora sustituido por Michael Jai White), éste se encuentra en Rusia filmando un anuncio. Un día descubre a unos ladrones en su hotel, pelea contra ellos pero termina inconsciente. Al final, todo se trata de un trampa para incriminar al campeón de boxeo y encerrarlo en una cárcel de máxima seguridad para hacerle participar en peleas clandestinas y que se enfrente contra el campeón del presidio, Boyka (Scott Adkins). Él cual se autodenomina el luchador más completo del mundo.
Para la realización de esta secuela por supuesto que no se contó con nadie del equipo de la original. La realización pasa a manos del israelí Isaac Florentine conocido por su trabajo en la serie de los Powers Rangers. Él cual imparte su particular estilo de filmar, a base de cámaras lentas todas las patadas y golpes espectaculares de las peleas.
Es más, uno tiene la sensación que hace cámaras lentas de otras cámaras lentas. Esto para el espectador novato puede causarle un efecto negativo incluso pensándose que si la película no tuviera este efecto duraría 5 minutos ¿Hubiera sido Florentine un director ideal para el filme de Los Vigilantes de la playa? Eso nunca lo sabremos.
¿Pero entonces que es lo que más llama la atención de esta secuela y el motivo por el cual después ha seguido teniendo más entregas? En una palabra, Boyka. El villano interpretado por Scott Adkins es sin duda lo más destacable del filme.
Michael Jai White es un tipo de sobrada solvencia dentro del cine de acción y artes marciales (lo vimos en filmes como Spawn o El caballero oscuro) pero el carisma que derrocha el personaje de Adkins es superior. Hasta el punto que en las siguientes entregas es el protagonista. Como curiosidad tenemos a Ben Cross, el protagonista de Carros de Fuego, que interpreta al compañero de celda del protagonista.
Resumiendo el salto del cine al mercado doméstico le vino genial a Invicto. Si te gusta las artes marciales y las cámaras súper lentas este es tu filme. Además sirve de tarjeta de presentación para alguien como Adkins al que luego lo hemos visto en infinidad de superproducciones (Doctor Strange, La hora más oscura) siempre haciendo de secundario.
Por @ged_joe