Nada que resucitar.
En el 2011 el director Simon West nos sorprendía con el remake de una película de Charles Bronson titulada The Mechanic, protagonizada por Jason Statham, Ben Foster, y con la participación de Donald Sutherland, que con su toque a serie B, nos dejó un buen sabor de boca.
Con el mismo presupuesto de 40 millones de dólares, nos llegó en 2016 su secuela, Mechanic: Resurrection, pero muy alejada de la acción casi real y justa de su primera parte, dando lugar a una película llena de acción sin descanso. Con uno de los guiones más malos que se han hecho sobre el género de acción, y alguna que otra escena casi de risa, nos encontramos con un gazpacho de géneros. La acción táctica y sigilosa ha pasado a ser tres gags con prácticamente dos tiroteos rodados en el mismo escenario, un barco.
Viendo la película empiezas a tener la sensación de que los efectos de impacto de los disparos están realizados mediante CGI, y no sólo eso, ya que a veces, me ha dado la misma impresión con los casquillos de las armas en determinadas tomas. Por otra parte, hacía tiempo que no veía una fotografía tan mediocre en una película de este presupuesto. Los blancos quemados sólo acentúan el maldito croma, y si pecas de exceso de saturación el único efecto que se produce es el acabado de un anuncio de perfume barato. El halo luminoso que rodea a los personajes en gran parte de los escenarios resulta molesto consiguiendo que el film tenga poca credibilidad.
Pero no todo es negativo en su conjunto. Precisamente ese es el error principal, el conjunto. Si analizamos la película por partes, la acción es correcta, los tiroteos están muy bien conseguidos, las infiltraciones menos lograda que en su primera parte, pero aun así deja la seriedad apostando por la diversión como en la saga de Transporter.
The Mechanic no te la puedes tomar en serio. Su primera parte era un thriller que nada tiene que ver con su secuela. La podrían haber llamado de otra manera que nos la hubiéramos creído igualmente, al estilo como todos sabemos de los títulos de segundas partes que aprovechan el tirón comercial. Si eres de los que busca una película de acción sin pretensiones, no lo dudes, ve a por ella, pero si por el contrario buscas una película más al estilo de su primera parte, es posible que te lleves una decepción.
Por @javi_cine